Autor: Dr. Hernán Fuentes Ponce Magister (c) en educación en salud UMCE.
BACTERIAS CARIOGÉNICAS:
La abundante evidencia científica confirma el papel clave de las bacterias del grupo Streptococos Mutans (SM) en el inicio de las caries dentales, que continúa siendo la enfermedad crónica con la más alta prevalencia mundial.
Especial relevancia tiene el primer contagio de los bebés con éstas bacterias que se produce a través de la saliva de los adultos cercanos, especialmente la madre.
En 1975 Berkowitz y Jordan plantearon la posibilidad de transmisión de los S. Mutans desde la saliva de la madre al niño y en 1988 Caufield demostró que los S. Mutans recolectados en saliva de niños eran genéticamente similares a los de sus madres (transmisión vertical).
Actualmente se acepta que la cantidad de S. Mutans encontrados en saliva de los niños es similar a la sus madres y que niños de madres con altas cifras de S. Mutans se contagian a edad más temprana.
Para tranquilidad de las mamás digamos que este contagio por S. Mutans de madre a hijo, requiere no una sino repetidas y frecuentes exposiciones. Los tests de saliva actuales son capaces de detectar los S. Mutans a partir de una cierta cantidad de bacterias, cifras muy pequeñas darían resultados negativos. En el gráfico siguiente apreciamos los resultados de un estudio australiano (2003) en que siguieron un grupo de niños desde el nacimiento hasta los 2 años. Se midió S. Mutans en saliva cada 3 meses con resultados entre un 18% positivo a los 3 meses hasta un 79% a los 24 meses de edad.
Prevalencia acumulativa de colonización de Streptococos Mutans .
Journal of Dental Research 2003
Según estudios recientes las conductas de riesgo más frecuentes serían : besar en la boca a sus bebés, compartir cucharas al alimentarlo, chupar el chupete de sus bebés “ para limpiarlo” y compartir cepillos de dientes con los niños.
Conductas de riesgo serían también tener un irregular hábito de cepillado de dientes de los niños (menos de 1 vez al día) y el contacto prematuro con el azúcar en cualquier forma antes de cumplir 1 año de edad.
La estrecha unión madre – hijo, pilar fundamental para el desarrollo infantil puede darse perfectamente sin caer en éstas conductas de riesgo de transmisión precoz de bacterias cariogénicas a sus bebés.
VENTANA DE INFECTIVIDAD.
La primera infección por S. Mutans es el factor de riesgo fundamental para el futuro desarrollo de caries no solamente en los dientes temporales sino también en los dientes definitivos.
Como estas bacterias viven sobre los dientes y tienen propiedades únicas para adherirse a ellos, la colonización inicial se produce preferentemente (puede ser antes) cuando aparecen los primeros dientes, entre los 6 meses y los 2 ½ años de edad, en que se completa la dentición temporal. Este período de predisposición al contagio se llama “ “ ventana de infectividad “ y ha sido profusamente estudiado en muchos países.
ATENCION PREFERENCIAL A LA MADRE.
El concepto actual es que la prevención de caries en niños requiere mejorar las condiciones de salud bucal de sus madres, propiciando el autocuidado materno desde el embarazo, reduciendo los Streptococos Mutans en ella y evitando ( retrasando ) el contagio a sus hijos.
Se estima que niños con menos del 1% de Strepto Mutans en su flora bacteriana oral tendrían bajo riesgo de caries. En la forma aguda de Caries de la Infancia Precoz, que ataca en forma rápida y agresiva los dientes de niños pequeños , los S. Mutans pueden llegar a ocupar un 50% de la flora bacteriana oral.
Uno de los primeros estudios en éste tema fue realizado en 1983 en Finlandia por Alaluusua y Renkonen que concluyeron lo siguiente :
- niños que se infectan precozmente con Streptococcus Mutans antes de los 2 años de edad presentan en promedio 10.6 dientes cariados u obturados al cumplir 4 años.
- niños que no se les detectó dicha bacteria a los 2 años tenían solamente un promedio de 0.3 dientes cariados u obturados a los 4 años de edad.
La atención dental de la madre durante el embarazo incluye la motivación al autocuidado en ésta etapa tan importante de su vida, tratar sus caries, realizarle una limpieza profesional, aplicarle antibacterianos ( disponibles en variadas formas ) y mejorar sus hábitos de higiene oral antes que nazca su bebé.
STREPTOCOCOS MUTANS Y AZÚCAR.
Prerrequisito obligado para que se produzcan caries: tener una alta cantidad de S. Mutans en boca. Esto se consigue en forma óptima en presencia de frecuente ingesta diaria de azúcar especialmente entre comidas.
El azúcar equivale a “combustible de alto octanaje “para los S. Mutans ya que les permite desarrollar sus potencialidades que son: producir mucho mas ácido que con otros hidratos de carbono, multiplicarse en ése ambiente ácido mejor que la mayoría de las bacterias y además producir a partir del azúcar substancias adhesivas insolubles - glucanos - que les permite pegarse y acumularse en gran cantidad sobre los dientes, lo que se considera su principal factor de virulencia .
LACTANCIA MATERNA E INMUNIDAD ANTICARIES.
Podríamos suponer que a medida que los niños crecen el contacto de los niños con nuevas bacterias aumenta y debiera ser algo “natural “, que les permitiría formar anticuerpos contra ellas. En teoría se sabe que al entrar en contacto con los S. Mutans se induciría la formación de inmunoglobulinas “ anti S. Mutans “ . A través de la leche materna además el niño recibiría en los primeros meses éstos anticuerpos “anti S.Mutans “ , pero el por qué éstas defensas no son suficientes clínicamente hablando continúa en estudio.
RECOMENDACIONES.
Resumiendo lo expuesto detallamos algunas recomendaciones conducentes a disminuir el riesgo de caries en niños:
Atención dental y promoción del autocuidado de la madre desde el embarazo.
Evitar los besos en la boca al bebé. El amor no necesita manifestarse de ésa forma.
Evitar el azúcar ( cualquier forma ) durante el 1° año de vida, bebés no lo necesitan,
Realizar aseo bucal desde la aparición de los primeros dientes a los 5- 6 meses de edad, con una gasita primero y más adelante con un cepillo, a lo menos 1 vez al día, especialmente antes de dormir.
No hacer dormir al bebé con mamadera con leche u otros líquidos endulzados.
Evitar compartir alimentos con los bebés (cucharas conservan 48 hrs. los S.Mutans).
Evitar “limpiar” el chupete de los bebés en la boca de los adultos.
Después del año incorporar el azúcar con moderación.
Acostumbrar al niño a beber agua. No inducir al sabor dulce
Valorar la lactancia materna como beneficio para la salud buco-dentaria.
Valorar la dentición temporal.
CONCLUSION FINAL:
Una mamá con buenos hábitos de cuidado dental, repetirá estos patrones en sus hijos y se crearán las mejores condiciones para una adecuada salud buco dentaria tanto de ella como de su grupo